En un regreso triunfal a su ciudad natal, Shakira cautivó a miles de fanáticos en Barranquilla con su gira «Las mujeres ya no lloran». La cantante, que había enfrentado recientemente un cuadro abdominal que la obligó a ser hospitalizada, se presentó renovada en el Estadio Metropolitano, donde su energía y su música contagiaron a todos los presentes.

Sin embargo, la verdadera estrella del concierto fue su madre, Nidia Ripoll. La presencia de la señora en primera fila no pasó desapercibida. La madre de la artista, a pesar de haber atravesado dificultades de salud en el pasado, mostró una vitalidad que sorprendió a los asistentes. Con una sonrisa radiante, se unió a la multitud para cantar ‘Antología’, una de las canciones más icónicas de la cantante, haciendo que el momento se volviera aún más emotivo.

La imagen de Ripoll cantando y disfrutando del espectáculo, junto a su nieto Milan, rápidamente se viralizó en redes sociales. El gesto no solo resaltó el amor y apoyo incondicional hacia su hija, sino que también se convirtió en un símbolo de la unidad familiar y el espíritu de celebración. El concierto de Shakira en Barranquilla no solo fue una noche de música, sino un evento cargado de emociones, donde el lazo familiar se convirtió en uno de los momentos más memorables.