La artista paraguaya Aye Alfonso, quien conquistó al público al coronarse ganadora del programa Factor X España, atraviesa un momento complicado en su relación con sus seguidores. Su triunfal regreso al país estuvo lejos de ser una celebración. Nadia Portillo, cantante y referente de la movida tropical, analizó el fenómeno y explicó que el cambio de percepción del público hacia Aye se debió, en gran parte, a la filtración de un contrato que estipulaba un cachet de 20.000 dólares por presentación, una cifra que generó indignación en muchos.

Portillo aseguró que ese monto exorbitante marcó una brecha emocional con la gente que la apoyó desde el inicio. «El público sintió que ella se alejó, que se volvió inalcanzable. Hubo una sensación de traición, como si se olvidara de quiénes la votaron y la hicieron ganadora», expresó en diálogo con el programa Churero. Según la exintegrante de Las Kchorritas, lo que pudo ser una estrategia de posicionamiento terminó siendo una barrera que dañó la conexión con sus raíces.

La cantante cumbiera insistió en que el problema no fue el éxito de Aye, sino cómo se gestionó su regreso. «La gente esperaba celebrarla, verla cerca, en sus escenarios. Pero con ese presupuesto, muchos dijeron: ‘¿Y ahora quién puede pagar para verla?’. Esa fue la herida», reflexionó Portillo. El caso pone en evidencia cómo una mala lectura del contexto puede transformar el orgullo nacional en decepción popular.