Jazmín Mernes decidió hablar con claridad sobre el difícil momento que vivió en los últimos meses, señalando a los concursos de belleza como el principal detonante de su crisis emocional. En una sincera entrevista con el programa “Kaos”, la modelo aseguró que actualmente se encuentra en tratamiento y bajo medicación, lo que le permite abordar públicamente su experiencia. “No fue fácil, pero aprendí a priorizarme. Mi salud mental estaba en juego”, confesó con entereza.

La joven, que incluso abandonó su trabajo en la radio para enfocarse en su recuperación, relató que su participación en el certamen Miss Mesoamérica, realizado en El Salvador, marcó un antes y un después. Lejos de ser una experiencia glamorosa, asegura que el entorno fue hostil, estresante y emocionalmente desgastante. “No era yo, estaba destruida por dentro. La presión es inhumana, y lo que se ve en redes es solo una parte”, expresó con firmeza.

Más allá del impacto personal, Jazmín aprovechó la oportunidad para visibilizar los efectos que pueden tener estas competencias en la salud mental de las participantes. Con su testimonio, rompe con el mito del mundo “perfecto” de las misses y pone sobre la mesa una conversación necesaria: el bienestar emocional no puede quedar a la sombra del brillo de una corona.