Mientras el mundo entero llora la partida del papa Francisco, en Paraguay el periodista Enrique Vargas Peña decidió nadar contra la corriente y desatar una tormenta en las redes sociales. Sin un mínimo de tacto o pausa, posteó en su cuenta de X: “La muerte de Francisco I no debería ocultar que fue uno de los peores pontífices de la historia eclesiástica”. El comentario, publicado apenas minutos después de confirmarse el fallecimiento del pontífice, fue percibido por muchos como una provocación deliberada y una falta total de respeto.

Los internautas no tardaron en reaccionar con furia. “No soy católico ni cristiano, pero se fue el mejor papa que entendió al mundo actual. Aceptá que tu problema es personal”, respondió un usuario, haciendo alusión a los comentarios que han rodeado al periodista en el pasado. Otros fueron más directos: “Vargas Peña no pierde oportunidad de hablar desde el resentimiento. Francisco amó al Paraguay y a su gente, vos solo amás escucharte hablar”.

No es la primera vez que Enrique se mete en el ojo de la tormenta, pero esta vez cruzó una línea para muchos. Cuestionar al papa es una cosa, pero hacerlo en el mismo momento de su muerte, sin sensibilidad ni contexto, fue leído por muchos como una necesidad constante de protagonismo disfrazada de “opinión”. El periodista, fiel a su estilo, no rectificó ni borró el posteo, dejando en claro que la polémica es su zona de confort.

En un país de profunda fe como Paraguay, sus palabras generaron más que enojo y decepción. Mientras millones despiden al líder espiritual que supo ganarse el cariño de los pueblos latinoamericanos, Enrique Vargas Peña vuelve a apostar a la controversia para seguir vigente. ¿Libertad de expresión o falta de humanidad? El debate está abierto y más encendido que nunca.