Salvador Cabañas realizó una emotiva visita a Caacupé, donde cumplió una promesa personal y agradeció por los momentos decisivos que marcaron su historia. El exdelantero llegó temprano a la Villa Serrana, acompañado por feligreses que lo recibieron con admiración, conscientes de que su vida es considerada por muchos como un testimonio de fortaleza y fe inquebrantable.

La presencia del “Chava” generó un fuerte impacto entre los peregrinos. Su recorrido desde el 2010, cuando sobrevivió al recordado ataque en México, lo convirtió en un símbolo nacional de resistencia. Aunque aún enfrenta secuelas y desafíos, Cabañas asegura que su fe fue el motor que lo mantuvo firme en su recuperación y en cada etapa de su nueva vida.

Este año, además, el exfutbolista estuvo en el centro de una polémica familiar, luego de que sus hijos impulsaran un proceso judicial para declararlo incapaz de administrar sus bienes. Lejos de detenerse en el conflicto, Cabañas eligió enfocarse en lo espiritual. Su caminata hasta la Basílica fue una forma de reafirmar esperanza, serenidad y confianza en que, pese a las dificultades, todo encontrará su cauce.