La gran final de la primera temporada de MasterChef Celebrity encendió las hornallas y también las redes. Luego de un exigente desafío gastronómico en el que las finalistas Jessica Torres y Karina Grau presentaron una entrada, un plato principal y un postre, el jurado anunció que Karina era la ganadora del certamen. La conductora celebró emocionada, se llevó el trofeo y un premio de 50 millones, pero la polémica no tardó en llegar a la mesa.

Minutos después del anuncio, el hermano de Jessica, Yito Torres, publicó duras críticas en sus redes sociales, asegurando que el resultado estuvo “arreglado” y que Karina habría recibido ayuda externa durante la prueba decisiva. Según sus palabras, un chef que se encontraba fuera de la cocina habría guiado a la ganadora sin que eso fuera mostrado al público. “Un robo descarado. Todo editado. El jurado no hizo nada”, denunció indignado.

Mientras Karina agradecía el premio y cerraba la noche entre aplausos, el escándalo paralelo comenzaba a viralizarse. En las redes, los fans se dividieron entre quienes celebraban el triunfo y quienes sospechaban favoritismo. Aunque la producción aún no se pronunció oficialmente sobre las acusaciones, el final de temporada dejó sabor agridulce: una ganadora con talento y una polémica que promete seguir dando que hablar.